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Que levante la mano quien no ha entrado en una tienda o en un centro de belleza y no ha querido que su casa huela igual o, al menos, con esa intensidad. Muchas veces, los ambientadores eléctricos son los culpables, sobre todo, en las grandes superficies. Sin embargo, en los espacios más reducidos, los difusores aromáticos pueden conseguirlo fácilmente y, además, con otras ventejas asociadas, como la de aumentar la humedad de la estancia o producirte una sensación agradable de bienestar. Son mucho más económicos que los primeros y, además, puedes conectarlos y desconectarlos a tu antojo. Por eso, nos gustan.

Estos pequeños aparatos utilizan los principios de la aromaterapia para crear un ambiente acogedor a través, precisamente, del aroma. Un aroma que, siempre que puedas, debes buscar en los aceites esenciales, por ejemplo, de la lavanda o del jazmín. El primero, te relaja; el segundo es anti estrés. Por tanto, no se trata solo de que tu casa huela bien, sino de que te relajes y disfrutes de tu hogar.

No todos los difusores aromáticos son iguales, aunque la gran mayoría de ellos funcionan de una manera muy parecida. Para elegir uno u otro, además de las características que te contaremos a continuación, es muy importante que tengas claro si quieres aumentar la humedad de tu hogar o no, porque no siempre está recomendado hacerlo. En el primer caso, el que más nos gusta es el de Cecotec, por su relación calidad-precio, por su capacidad y por su tamaño. Para el segundo, en el que no queremos utilizar agua, sin duda, nuestra elección es el de LINTRO, por su gran autonomía. De hecho, es el único que funciona de manera inalámbrica.

Este primer difusor trabaja sin agua, con lo que pulveriza los aceites esenciales de una manera bastante íntegra. Tiene un motor ultrasilencioso que apenas genera ruido, pero que es capaz de cubrir bastante espacio con su aroma. A diferencia de los demás, funciona colocando las botellas de aceites directamente en su interior (permite productos de 5 ml, 10 ml o 15 ml). Tiene tres ajustes de intensidad, que varía según el tiempo: 12,5 horas, 25 horas o 60 horas de difusión. Cuantas menos horas, mayor concentración de producto. Tiene apagado automático y 9 colores diferentes de luz LED.

Aunque se venden por separado, tiene preparados de aceites esenciales con diferentes objetivos que, al principio, pueden servirte como inspiración a la hora de encontrar el tuyo, como Good morning o Yoga matutino.

Lo mejor - Puede utilizarse sin estar enchufado. - No utiliza agua, con lo que el aroma es más intenso.

A mejorar - El precio no es el más económico.

Este difusor de ambientes es perfecto para aquellos que no quieren aumentar la humedad de su hogar, pero sí conseguir un aroma único que les ayude a relajarse. 

Este difusor de aromas eléctrico LED de BUTLERS tiene siete colores diferentes orientables y depósito de agua, pues para su funcionamiento el fabricante nos recomienda el uso de agua. Sin embargo, en el mismo depósito, se puede añadir unas gotas de aceites esenciales. Se enciende y se apaga con un solo botón. Su diseño es muy minimalista, con un tamaño medio y está fabricado en cerámica, que lo hace, ya de por sí, bastante más elegante. Ahora bien, su base es de plástico.

Lo mejor - Tiene función de lámpara.

A mejorar - No tiene temporizador. - Necesita estar conectado a la red eléctrica para funcionar.

Es un buen difusor de aromas si lo que buscas, además, es aumentar la humedad de la estancia de tu hogar elegida. Su diseño es bonito y, además, puedes usarlo como lámpara.

Este difusor de aromas de Cecotec tiene dos tamaños (150 ml y 300 ml) y dos colores diferentes (madera o madera oscura). Todos ellos utilizan una tecnología ultrasónica que lo que consigue es convertirlos en un aparato muy silencioso. Es de tipo humidificador, por lo que también necesita el agua para funcionar, algo que nos ayuda mucho a reducir la sequedad de una estancia. Ahora bien, puedes utilizar aceites esenciales en el mismo depósito. Basta con poner entre tres y cinco gotas.

No tiene temporizador, pero sí puedes marcar si quieres que funcione continúamente, durante una hora o tres. Después, se apagará de manera automática. Para ello, tienes botones diferenciados. Y la luz, con siete colores diferentes, es de control manual, automática o puede mantenerse apagada.

Lo mejor - Apenas genera ruido. - Puedes cambiar el color de la luz o apagarla.

A mejorar - No es inalámbrico. - No tiene temporizador.

Si tienes un bebé en casa o te molesta cualquier aparato ruidoso, este sería tu difusor de aromas, porque su funcionamiento es totalmente silencioso. Además, para los más pequeños, puede convertirse en una luz de noche.

Gracias a la capacidad de 300 ml de este difusor de DERSHARA, llegamos a un tiempo de difusión de hasta 6 horas, aunque a las 4 horas tiene apagado automático. Es también un difusor ultrasónico con función de humidificador, por lo que se utilizar un depósito de agua. Si quieres utilizar aceites esenciales, necesitarás tener un filtro diferente por cada uno de ellos, pues el recambio del filtro del algodón (colocado en el interior de su tubo) es manual. Debes cambiarlo cuando veas que se ha estropeado. Funciona siempre conectado, pero puedes hacerlo por USB, con lo que es prácticamente portátil, conectándolo en el coche o en la oficina.

Lo mejor - De tamaño mini, es un difusor prácticamente portátil. - Tiene dos modos de pulverización: continuo o intermitente.

A mejorar - Por su tamaño, no sirve para habitaciones muy grandes. - No es inalámbrico y necesita cable USB.

Este difusor nos gusta especialmente por su diseño mini que nos permite tenerlo, no solo en casa, sino en otros lugares, como la oficina. Por ello, es perfecto para quienes quieren llevárselo a la oficina.

Otro difusor de aceites esenciales por nebulización en frío, es decir, sin la necesidad de utilizar agua, que nos gusta mucho es este de Zen'Arôme. Por su tamaño, bastante superior al resto, puede ser utilizado en espacios más grandes. Está fabricado en madera FSC procedente de bosques gestionados de forma sostenible y de cristal fino soplado artesanalmente. Su capuchón superior impide que entre polvo en su interior. Podemos regular hasta tres intesidades, tanto de difusión como de iluminación (tiene luz LED de diferentes colores). Se puede programar para una difusión continua o con pausas y, tras dos o cuatro horas, se apaga automáticamente.

Lo mejor - Alcanza hasta 80 metros cuadrados. - Sus materiales, madera y cristal soplado artesanalmente.

A mejorar - No es inalámbrico.

Sin duda, esta es la mejor opción para los que buscan diseño, sostenibilidad y un difusor por nebulización en frío, sin agua, económico.

Con seis colores de iluminación, lo que más nos gusta de este difusor de Breuer es que funciona perfectamente como lámpara. Es decir, que combina la aromaterapia (lo que conseguimos con los aceites esenciales) con la cromoterapia (lo que conseguimos con los diferentes colores). Está fabricado en bambú y porcelanda, con lo que su estética nos parece muy elegante. Funciona mediante una tecnología de ultrasonidos, por lo que con vibraciones de alta frecuencia se consiguen generar pequeñas gotas aromáticas que salen del aparato junto al agua. Es muy silencioso y su consumo es realmente bajo. Por último, se regula en tres intensidades: 1 hora, 3 horas y 7 horas.

Lo mejor - Su diseño funcional. - Consumo bajo.

A mejorar - Su capacidad, tan solo de 180 ml que puede quedarse corta. - Su recorrido es de apenas 20 metros cuadrados.

De todos los difusores que hemos analizado, este es el que mejor diseño tiene, funcional y elegante, pero además es la mejor opción si tu objetivo es la relajación, porque combina la aromaterapia y la cromoterapia.

Un difusor de aromas es un pequeño dispositivo muy sencillo que es capaz de vaporizar, mediante sutiles vibraciones, partículas de aceites esenciales en el aire. Para ello, lo que hace es separar las partículas que conforman el aceite elegido y, en general, las mezcla con agua. De esta forma, el aroma se puede inhalar sin que resulte abrumador o pesado, dispersándolo por todo el espacio. Así, conseguimos un olor suave y delicioso para nuestro hogar.

La gran mayoría de los difusores de aromas se pueden usar con dos tipos de líquidos: o bien aceites esenciales o esencias aromáticas, aunque dependiendo del aparato que finalmente hayas elegido, lo mejor es que leas atentamente las instrucciones del fabricante, quien te indicará cuál de ellos es más recomendable. Y es que, cada modelo, funciona de una manera específica. 

La diferencia entre los aceites esenciales y las esencias aromáticas es muy sutil: 

En primer lugar, deberíamos saber que, para poder conseguir todos los beneficios de un aceite esencial, lo mejor es adquirirlo de la forma más pura. Además, si la producción de la que proviene es ecológica, libre de pesticidas y fertilizantes, conseguiremos que sus propiedades naturales apenas se alteren. En casa, consérvalos siempre en lugares frescos y en botes de cristal oscuros.

Entre los que más nos gustan para crear un buen aroma en nuestro hogar, estarían: 

La diferencia entre ambos aparatos es sencilla pero, muchas veces, la desconocemos. De hecho, cuando en mi casa entró el primer difusor de aromas, lo confundí con un humidificador y era reacia a utilizarlo, pensando que no necesitábamos más humedad en casa. Ahora bien, no es lo mismo:

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